viernes, 20 de marzo de 2015

Novias de cine: Cenicienta (película de 2015) parte II. El vestido de boda.

La nueva película de Cenicienta ha causado furor, entre niñas, madres y demás aficionados a Disney. El vestuario ha sido de lo más acertado, gracias a la participación de la diseñadora de cine Sandy Powell, ganadora de tres Oscar de la Academia en la categoría de mejor diseño de vestuario. 
Hoy me quiero centrar en el vestido de boda.
Se trata de un diseño que sigue con la idea de ambientación del siglo XIX y los años 50. Aun así, podría pasar por un diseño actual de estilo vintage. Corpiño ajustado. Flores bordadas en toda la falda y cola. Mangas transparentes sobre un escote palabra de honor.
La intención de la diseñadora era crear unos trajes audaces y llenos de color, pero al mismo tiempo creíbles y fieles al espíritu de los personajes. En este sentido la creación del traje de novia fue todo un desafío, en el sentido de que quería un traje totalmente diferente al vestido azul de baile y al mismo tiempo sencillo y efímero. Para ello crearon un traje de color beige confeccionado con telas de organza y seda. Diseñaron un corpiño ajustado de manga larga, y una falda con estampados florales de cola larga tipo catedral. Todo para realzar la pureza, bondad, modestia y sencillez con la que Cenicienta conquistó el corazón del Príncipe.
Un equipo de costureras de forma meticulosa, cortaron, cosieron e hilvanaron juntos el elegante traje con una longitud hasta el suelo durante casi un mes. Una vez lo confeccionaron, entregaron el vestido a unos artistas que pintaron a mano flores de forma intrincada en su falda. Llevó 16 personas y 550 horas completar el vestido. 
A la creación del vestido va unida una anécdota que cuenta como estuvo a punto de destruirse el vestido durante una sesión fotográfica. Mientras Lili posaba con el traje, permaneció demasiado cerca de un calentador eléctrico que prendió fuego al vestido. Un desastre ya que toda la capa superior se quemó y tuvo que ser rehecha. En el momento del accidente, en lugar de preocuparse por la integridad de la actriz, todos se lanzaron a ver cómo estaba el vestido, porque debido al tiempo y presupuesto ajustado del que disponían solo habían tenido tiempo para hacer un traje de novia. Y no les daba tiempo ha hacer uno más. Afortunadamente el daño fue menor, y se pudo terminar a tiempo.
Este diseño no hace más que reafirmarme en la idea de que el color, cuando el trabajo está bien hecho realza muchísimo el vestido. Las flores bordadas en la primera capa de seda es lo mejor del vestido.
¿Os casaríais con este traje? En mi caso yo ya sé la respuesta. Sí.
Actualización (09/04/2015). En la página web del diseñador Alfred Angelo he encontrado una edicion limitada de este vestido a la venta. Os dejo el enlace:
http://www.alfredangelo.com/Collections/Disney-Fairy-Tale-Bridal/252/?pg=1

2 comentarios:

patri dijo...

yo tambien me casaria con el es precioso

Anónimo dijo...

Yo nunca he querido casarme de blanco, me casé con pantalones vaqueros, al ver el vestido me dieron ganas de casarme otra vez, tanto el blanco como el azul me han encantado.

 

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